El diseño y desarrollo de diversas funcionalidades para superficies mecanizadas a través de procesos de texturización ha sido una herramienta muy empleada a lo largo de la Historia.
En la actualidad existen numerosos sectores, como el automovilístico, aeronáutico, óptico, microfluídico o electrónico, en los cuales se está trabajando con la finalidad de desarrollar superficies con objetivos específicos tales como:
- Reducción de los coeficientes de fricción con fluidos o entre superficies. Distribución uniforme del aceite y efecto hidrodinámico
- Mejora de estanqueidad de acoplamientos estáticos y dinámicos
- Absorción de partículas del lubricante
- Mejora de la adherencia de recubrimientos
- Reducción de las tensiones residuales y las desviaciones de forma
- Mejora de la refrigeración y mejora de la reflectancia
- Generación de hidrofobicidad e hidrofilidad